El Valor de la Amistad – Joaquín y Eduardo eran dos jóvenes amigos aficionados al futbol; ambos se estimaban mucho pero Joaquín tenía constantes arranques de ira. Un día, mientras jugaban futbol en el mismo equipo, Eduardo se distrajo por unos segundos e hizo una mala jugada que afectó el marcador final del partido. Joaquín sintió mucho coraje por haber perdido y sin pensarlo, corrió hasta donde estaba Eduardo y le gritó insultándolo por haber sido el culpable.
De regreso a casa, Joaquín pensó en lo que había dicho a su amigo y se sintió muy triste. Al llegar, su padre notó la angustia en su cara y le preguntó: – “¿Qué te pasa hijo, a caso perdieron?”, Joaquín asintió con la cabeza y agregó: – “sí papá, pero eso no fue lo peor… me dejé llevar por la ira y, sin pensarlo, insulté y maldije a Eduardo, mi mejor amigo”.
El señor, quien ya conocía muy bien el problema de su hijo le dijo: -“yo te voy a ayudar a controlar toda esa ira y a que puedas conocer un poco más lo que es el valor de la amistad ”, llevó a su hijo al patio trasero de la casa, le dio una bolsa con clavos y un martillo y le dijo: -“cada vez que pierdas la calma tienes que venir aquí y clavar un clavo en esta cerca ”.
Los primeros días Joaquín clavó más de 30 clavos; sin embargo, poco a poco se fue calmando porque descubrió que era más fácil controlarse que clavar clavos. Finalmente, un día le dijo a su padre: -“lo he conseguido, ya no he clavado ni un solo clavo”, el señor lo felicitó y respondió: -“ahora, cada vez que logres controlarte ven y saca un clavo de la cerca”; así lo hizo y llegó el día en que Joaquín había conseguido quitar todos los clavos, así que corrió a decirle muy orgulloso a su papá. –“Mira hijo, haz hecho muy bien, pero fíjate en todos los agujeros que quedaron en la cerca, ya nunca será la misma de antes… cuando dices o haces cosas con coraje dejas una cicatriz como este agujero en la cerca”.
Joaquín comprendió entonces todo el daño que había hecho no sólo a Eduardo, su amigo, sino a tantas personas como su mamá, sus hermanos, sus compañeros… y desde entonces, aprendió a controlar sus impulsos y mejoró no sólo su carácter, también sus relaciones con los demás.
Los amigos son un regalo de Dios, no permitamos que la ira nos haga lastimar a quienes más queremos. En esta cuaresma, oremos por los verdaderos amigos.
“El Espíritu lo fue llevando por el desierto mientras era tentado” Lucas 4:1-13
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¡¡Recibe Bendiciones!!
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El Valor de la Amistad
Nadie tiene más amor por sus amigos que aquél que da la vida por ellos, Jesús dio la vida por nosotros, tengamos la confianza de acercarnos a Él a través de la oración.
hola, solo muchas gracias por esta hermosa reflexion.
Hola Laura, me da mucho gusto que haya sido de tu agrado, gracias por tomarte el tiempo para comentar, saludos y bendiciones