Domingo de Ramos – Reflexión Cristiana

Domingo de Ramos - Reflexiones Cristianas

Domingo de Ramos – Jesús estaba en camino al pueblo de Jerusalén, pero antes de entrar al pueblo se detuvo y mandó a dos de sus discípulos con instrucciones específicas para que desataran y le trajeran un burrito que estaba en una aldea cercana. Este burrito jamás había sido montado por ningún hombre. Sus discípulos le contestaron: “Señor, pero ¿qué diremos si sus dueños nos reclaman?” –  Jesús les respondió; “simplemente digan El Señor lo Necesita y lo devolverá” Así hicieron los discípulos, todo sucedió como les había dicho Jesús. Jn. 12.12-19

Reflexión sobre el texto del Domingo de Ramos

Así como los discípulos que obedecieron a Jesús cuando les mandó buscar al burrito, para entrar a Jerusalén, así nosotros también estemos atentos a lo que Dios nos pide para que se realice su obra en nuestra vida.

Cuando Jesús iba entrando a la ciudad de Jerusalén todos le aclamaban y le bendecían, entonces nosotros también aclamémoslo, pero también obedezcamos lo y sigámoslo,
seamos mansos como aquél burrito que jamás había montado ningún hombre y que dócilmente permitió que Jesús subiera en el, así nosotros podemos dócilmente abrirle nuestro corazón a Dios y permitirle que entre a nuestra vida

Un sacerdote comentaba que el burrito (ingenuamente) pudo pensar que las  aclamaciones eran para el cuando Jesús iba entrando a Jerusalén montado en su lomo y que muchas veces nosotros actuamos así como este burrito, creemos que todo lo que nos sale bien es solo por méritos propios y nos olvidamos darle la gloria al que está sobre nosotros, es decir a Jesús.

Entrada de Jesús en Jerusalén – Domingo de Ramos

Oración para el Domingo de Ramos

“Señor Jesús, reconozco que Tú eres el rey triunfador, el rey humilde que vienes a dar la vida por mi y por todos, te pido que por favor entres en mi vida, ayúdame a vencer todo pecado y todo mal.

Jesús, así como entraste triunfal a Jerusalén, entra triunfante a mi propia vida venciendo todo pecado, quiero ser dócil y darte la gloria a ti cada vez que la gente vea algo bueno en mi y me reconozca, venciendo así mi orgullo y mi vanagloria, y de esta manera entregarme a ti y a los demás con Amor.

Gracias Jesús por dar tu vida y por darme la fuerza para vencer todo mal, gracias Dios Bueno y Misericordioso porque con tu victoria me muestras lo mucho que me estás amando. Amén.”

Fuente de la reflexión y de la oración: Radio María México

(Visited 4,352 times, 119 visits today)
Apoyanos Compartiendo:

Deja un comentario